SUEÑOS
No me gusta el sabor amargo de la vida. En mi sueños vivo la utopía.
Tengo ganas de cambiar el mundo... un corazón a la vez. La mudanza interior es el único camino. Creo en la revolución. Hay que creer en la gente. Hay que creer que es posible cambiar la realidad. Hay que creer que ninguna lucha es en vano. Pero se quieres cambiar el mundo, tienes que cambiar tu forma de ser.