Camila y María Sol...
Mis hijas...
No existe
en el mundo
por lo menos
en mi universo
un amor mayor
que el mío...
Nunca nadie
las amará tanto
mi alegría, mi vida
es dedicada
a vosotras
mis hijas queridas.
Me duele
en el alma
no estar cerca
estar presente
extraño
el barullo
los gritos,
el cariño
espero que
estos días
de ausencia
valgan la pena
y la vigília...
De lejos y ausente
estoy presente.
¡Las amo!
no pierdan
el sueño
que mi voz
el viento
la lleva
en sus alas
para depositar
en las mejillas
el más dulce
de los besos...
Acunen el sueño
el más hermoso
de todos
breve como
un segundo
trajinar
del tiempo
juntos siempre...