Estoy harto...
Ya no tengo motivación
todo es tan aburrido
incluso escribir...
Mi gran motivador eran las palabras
que se armonizaban en mi mente
y después con una deliciosa paciencia
conseguía colocarlas en el teclado
y transcribirla para deleite
imaginaba yo para mis lectores...
Pero últimamente no he tenido
la misma alegría de antaño
me parece fútil
todo aquello que escribo...
Y algo en mi interior
y del fondo del alma
me motiva para continuar.
Es una cruel paradoja
que mezcla lo real
a lo irreal...
Continúo escribiendo
y espero que no los decepcione
y si no es eso lo que esperan
mis más sinceras disculpas
en el fondo escribo
por ustedes mis caros lectores...