EL AMOR QUE ME TENIAS
Mano a Mano uno de los más hermosos
tangos de la guardia vieja, fué la inspiración
para este poema...
EL AMOR QUE ME TENIAS
Marcial Salaverry
El amor que me tenias,
siempre con amor lo pagué...
Ahora me dejastes,
pá seguir un otario
que te llena de guita,
y tira mi amor sincero por la ventana...
Ahora estás como bacana,
pero mañana cuando vieja estuvieres,
cuando estés tirada a la calle,
puedes llamarme,
que no voy decir que te calles...
Siempre un mango pá morfar
puedo te arreglar...
No soy tu deudor,
tampoco nada me debes,
"Mano a mano hemos quedado...
Y si alguna deuda chica
sin querer se me ha olvidado,
en la cuenta del otário que tenés,
se la cargás..."
Asi nos quedamos arreglados,
y si aún me quieres, pebeta maula,
puedes llamarme y vamos este tango bailar...
Marcial Salaverry
Santos 23/05/09
Poema inspirado en el tango MANO A MANO...
'Mano A Mano'
Rechiflao en mi tristeza, te evoco y veo que has sido
De mi pobre vida paria sólo una buena mujer
Tu presencia de bacana puso calor en mi nido
Fuiste buena, consecuente, y yo sé que me has querido
Como no quisiste a nadie, como no podrás querer.
Se dio el juego de remanye cuando vos, pobre percanta,
Gambeteabas la pobreza en la casa de pensión:
Hoy sos toda una bacana, la vida te ríe y canta,
Los morlacos del otario los tirás a la marchanta
Como juega el gato maula con el misero ratón.
Hoy tenés el mate lleno de infelices ilusiones
Te engrupieron los otarios, las amigas, el gavión
La milonga entre magnates con sus locas tentaciones
Donde triunfan y claudican milongueras pretensiones
Se te ha entrado muy adentro en el pobre corazón.
Nada debo agradecerte, mano a mano hemos quedado,
No me importa lo que has hecho, lo que hacés ni lo que harás;
Los favores recibidos creo habértelos pagado
Y si alguna deuda chica sin querer se había olvidado
En la cuenta del otario que tenés se la cargás.
Mientras tanto, que tus triunfos, pobres triunfos pasajeros,
Sean una larga fila de riquezas y placer;
Que el bacán que te acamala tenga pesos duraderos
Que te abrás en las paradas con cafishios milongueros
Y que digan los muchachos: “es una buena mujer”.
Y mañana cuando seas deslocado mueble viejo
Y no tengas esperanzas en el pobre corazón
Si precisás una ayuda, si te hace falta un consejo
Acordate de este amigo que ha de jugarse el pellejo
P’ayudarte en lo que pueda cuando llegue la ocasión.