CUANDO NADA MAS RESTA
Sólo resta
la última mitad del resto
Un ojo que consigue llorar
y otro
que a nada se lanza
Sólo resta
un recuerdo lleno de pedazos
que no se buscan
y en la oscuridad mas absoluta
se pierden y se dudan
Sólo resta
está fiesta a la que nadie fue
está carne rota
alejada para siempre del infinito
que consuela y cura
Un país del que nadie es ciudadano
una patria a la que se exijan
las verdades que ya no usamos
Sólo resta
el beso que se pudre
el abrazo que refuerza la renuncia
Y todos los cariños anuncian
una fea flor que se encoge al contacto del sol
una fea flor que desaparece
jurado eternidades a la oscuridad
Sólo resta
una ilusión frágil y rajada
que se aleja
Traduzido pelo poeta uruguaio Julio Ramos.