ebrio en sobriedad
Solo quiero respirar estar en cama reposando
estos huesos del ochenta y dos disfrutando de la
resaca matinal
Estoy cansado de estar cansado de fumar olvido
de beber la escencia de los besos de los sueños
de la resaca matinal
En deceso vivo clavado a mis años encendidos en la
macoña del tiempo que flagela mi piel encendida por
la resaca matinal
Me duele la cabeza tengo la fiebre del deseo prohibido
por haber bebido la sangre del merlot puesta en mi copa
por la resaca matinal
Me he entregado a los brazos de la inhibidora mirada del
manto que descorre con sensualidad el pudor de la embriaguez
de la resaca matinal
.