EL GRAN TALENTO DE LÁZARO (VERSÃO EM ESPANHOL)
En un gran bosque muy lejano, había un lindo pájaro que se llamaba Lázaro. El era del color naranjo y tenía una gran cresta en su cabeza.
En aquel bosque, todos los animales comentaban que Lázaro era un parajito muy raro, porque él se parecía más bien con un pequeño gallo.
Lázaro creció triste por tener aquella apariencia tan distinta de sus amigos pajaritos, ya que ninguno de ellos tenía una cresta en su cabeza.
Una noche antes de acostarse, Lázaro preguntó a sus papás por que el nació con ese aspecto tan extraño y ellos le explicaron que los animales que nacían con alma de artista siempre llegaban al mundo con una forma muy llamativa. Pero Lázaro, aun así, siguió con sus dudas.
Cuando amaneció el día, Lázaro decidió visitar el grande y poderoso Cóndor, profesor de la escuela de arte más importante del bosque. El quería preguntarle si sabía por qué él había nacido con una cresta en su cabeza.
Llegando a la escuela, Lázaro quedó muy contento al ver que tantos animales se entretenían estudiando teatro, dibujando, pintando y aprendiendo a tocar instrumentos musicales con los elementos de la naturaleza.
En la primera sala de clase, Lázaro escuchó una linda melodía. Algunas arañas componían una suave música con los sonidos del agua, del viento, de las piedras y de las hojas secas. Una linda arañita hacia sus acrobacias con sus patitas para el cielo:
Colgándose de un árbol/ giraba su cuerpito
Lentamente se bajaba/ con encanto dulcecito
Coloriendo y dibujando/ tejía su pañuelito
Lázaro seguía por los pasillos de la escuela cuando escuchó unos ruidos muy entretenidos, y se fue volando hacia aquella sala de clase para ver lo que sucedía allí. Al entrar allá, él se encontró con un grupo de monos que saltaban de un lado al otro, pegando los troncos de los arboles como si fueran verdaderos tambores.
¡Alegría, animalitos! / toquen, toquen los tambores
Corran, salten, aplaudiendo/ moviéndose con los temblores
Esto es arte, haz tu parte/sean hoy compositores
De repente, con su bello plumaje negro, llegó el profesor Cóndor y Lázaro se sorprendió al conocerlo, pues, era un ave muy grande y muy fuerte. El profesor lo invitó para que juntos entraran en la sala de artes plásticos.
Como el Cóndor era un ave muy imponente, inmediatamente abrió sus gigantescas alas. Con el ala derecha, mostró a Lázaro una gran pared blanca. Con el ala izquierda, le indicó a una mesa repleta de pocillos de pinturas de todos los colores, diciéndole con su voz muy ronca:
La naturaleza ni siempre es perfecta/ pero en ti no hay defecto
Tu talento está en la cresta/ aprovecha tu aspecto
Sé hoy mismo malabarista/ pinte el mundo con tu afecto
Lázaro abrió sus pequeñas alas y, en un bello vuelo, pasó su cresta por los pocillos de pintura. Usando su cresta como un gran pincel, Lázaro pudo pintar los más bellos y coloridos dibujos en la pared.
En aquella mañana, Lázaro se sintió el pájaro más feliz de todo el bosque porque él aprendió que en su cresta de gallo estaba escondido su gran talento para pintar.
Estimado lector:
El personaje principal, Lázaro, está inspirado en la especie “GALO-DA-SERRA”. Es un pájaro muy exótico, propio de la fauna de la región de la Amazonia. El profesor es un CÓNDOR, un ave que habita la Cordillera de los Andes. Por la geografía, ellos jamás podrían encontrarse. Sin embargo, como en la Literatura la imaginación rompe con las reglas, yo elegí unirlos para este cuento infantil.