INSENSATO DESTINO

Todos reunidos en la gran sala desde 6 horas antes. Alguien habló: “Apaga la luz y vámonos”. Otro dijo a gritos: “¿Por qué? Si no resolvimos el dilema”. El primero concluyó: “Mismo qué estemos aquí el resto de la vida nada podremos cambiar. El mal es tan profundo que no tiene cura.”