La leyenda del jardín encantado.

Cuenta una leyenda, que en un país muy lejano, había un castillo muy bonito, rodeado por varios jardines, cada uno mas hermoso que el otro. Pero, había un jardín que un día fue muy especial, el preferido de la reina. Ahora, sus flores no florescian mas, su cesped ya no era tan verde como antes, las aves ya no lo visitan mas... Agora era un sombrío jardín.

El rey, mando buscar jardineros de todas las partes del mundo, mas ninguno de conseguia dar vida a aquel sombrío y triste jardín.

Cierto día, una niña golpió la puerta del castillo pidiendo comida y albergue por aquella noche. Ella llevaba en sus hombros una enorme capa muy roja y dijo que era jardinera. Diijo que el perfume de las rosas la había llevado hasta aquel castillo. El mayordomo no creyó en la historia de la muchachita, pero aceptó que durmiése esa noche en el castillo . Uno de los soldados sugerió que ella fuese a dormir en el jardín sombrío y entre muchas risadas el mayordomo dejó. La niña se quedó muy triste al ver el jardín. Empézó a pasear por entre medio de las roseras y las acariciaba con mucho amor. Su tristeza era tanta, que gotas de lágrimas brotaban de sus ojos, como si fuesen gotas de lluvia y así regaba todo el jardín. Con sus dedos de vida, ella tocaba de leve las marchitas roseras.

Al amanecer, mariposas coloridas, abejas de todos los tipos, pájaros y los pica-flores se peleaban el encuentro con las rosas.

El mayordomo, al llegar al jardín, se quedó perplejo al ver aquella transformación. Corrió a los aposentos reales para contar el hecho. Nadie, en aquellas provincias jamás había visto un jardín tan hermoso como ese se transformara, simplemente encantado!

Todos buscaban la niña jardinera, mas ella había desaparecido. Lo único que encontraron en el jardín, fue la capa roja que la niña llevaba en sus hombros, que a los ojos admirados de todos, se transformó en un enorme roseral de lindas y hermosas rosas de color escarlate.

Nadie jamás vió u oyó hablar del paradero de aquella misteriosa niña jardinera.